jueves, 24 de noviembre de 2011

Ritmos Rojos

A mis dieciocho no tenia gran cosa,
poseía una sonrisa,
mantenía algunas miradas,
rentaba anécdotas ajenas,

El humo del cigarro jugaba a ser oxigeno y yo,
jugaba a beber de las bocas que nunca fueron mías,
Las bocas que no se atrevían a irse de viaje conmigo,
por no confiar en mi pluma,
ni ayer ni mañana

hoy es mañana
y casi todo es más sencillo,
tengo una fabrica de risas,
sigo manteniendo las miradas,

oferto anécdotas y el humo del cigarro
hace juego con el oxigeno de mi boca,
sólo me sobra lo que me hace falta,

y me falta la voz en el amanecer de los días,
tus ojos color mirada de miel
gotas de té de manzanilla,
los ritmos rojos de tu cintura
que habitan el laberinto oscuro de tu lejanía.